lunes, 24 de agosto de 2009

treinta y monedas




Ni orientales ni son mejores ni la edad de otro. Esta semana los cumplo y punto:



treinta y monedas


pocas sí pero ya empiezan a pesar

como un lunes temprano sin buscapinas

porque nunca me avisaron no

que un zonda trapero iba a pasar un agosto

a levantar las primeras chapas

a clavar sus uñas de tierra bajo mis ojos

y llevarse los frescos duraznos de la veintena

a 10 pesos el cajón


tampoco fueron culo de decirme

por qué las muelas no vuelven a crecer

ni que el talle 46 lo usaba también mi abuelo

ni cómo es que la barba rala sin piedad

me convirtió de yuppie italiano en un mendigo

de canas irrespetuosas


para todo sin embargo hay venganza

porque la soberbia es la cara oculta

de la moneda de los años

es por eso que en el trueque de la vanidades

me esforzaré con malicia capital

para cambiar cada uno de los 365 días

en milagros pasión peces y pan

para que dentro de un tiempo

cuando alguien cumpla los 33

le digan «ah cumplís la edad de hernán»


miércoles, 19 de agosto de 2009

Incentivo docente


Recreo. Salgo del curso y entro a la sala de profesores. En la escuela donde trabajo es realmente una alegría ese breve encuentro entre colegas. Sin embargo esta vez había más risas que de costumbre. Alguien pedía el adelanto para la reservaciones del día del maestro.

-Ay -dijo una profesora-, no sé si mi marido me va a dejar ir.

Timbre. Todos se van y yo me quedo solo, porque tengo una hora sandwich. Un rojo pasión hizo que girara mi cabeza hacia la pared, donde hay un espejo, para leer con la mandíbula en el piso:


DÍA DEL MAESTRO "AFRODISÍACO"


-Cena glamorosa para encender la magia-

Aperitivo:

Empanadas del paraíso-Pinchos de la sensualidad-Degustación de fiambres exóticos-
Toc toc
con: ensalada del vergel de Adán y Eva- ensalada de la tentación.
Cazuelas con: almejas para pecar y mejillones del amante ardoroso.


Empecé a mirar hacia los costados, me aflojé la corbata y comencé sin darme cuenta a apantallarme con unos trabajos prácticos sobre la poesía modernista hispanoamericana.

Primero:

Pastas lujuriosas: lasagna de salmón y creps de cuatro quesos

Segundo:

Capricho sensual de pollo

Sí, me dije azorado, esto lo escribió un poeta de la torre de marfil. Un Rubén Darío de la gastronomía que quiere comerse un cisne (o un ganso, dada la urgencia).

Tercero:

Pasión de chocolate


Extras:

Dulces prohibidos
Pizzas para fantasear
Bebidas de los dioses


¡Vení a lo seguro!

Entonces me levante y salí casi corriendo de la sala. Después dicen que los docentes nos rascamos en las vacaciones de verano e invierno, mientras los demás trabajan hasta los sábados. Pero no saben los "disgustos" que uno pasa adentro de una escuela.


miércoles, 12 de agosto de 2009

Las preguntas del futuro


Un viajero del tiempo de 1979 atraviesa tortuosamente los treinta años que lo separan de la actualidad. Sólo puede hacer tres preguntas banales sobre el futuro y regresar inmediatamente. Así la continuidad espacio-tiempo no se verá afectada:

Viajero de 1979: -¿Cómo va la obra discográfica del talentoso Charly García?
Hombre de 2009: -Ya se recuperó de sus adicciones y su próximo cd se lo producirá Palito Ortega.

Viajero de 1979: -En este país siempre ha habido mujeres hermosas ¿Quién es ahora la vedette más importante?
Hombre de 2009: -Fácil. ¡Moria Casán!

Hombre de 2009: - ¿Algo más?
Viajero de 1979: - No... Te iba a preguntar quién es el presidente de la A.F.A., pero prefiero sorprenderme dentro de tres décadas.

martes, 4 de agosto de 2009

Deshacer escritura


Tu paso acaba de aplastar la última hoja del otoño. Entrás al cíber y ya es invierno. Buscás entre las cabinas como se busca una palabra en el diccionario. Habilitame la 9, flaco. Tecleás lentamente tu nombre en el buscador: más de mil páginas te reflejan. De algún modo, pensás, alguien me está persiguiendo. Alguien desea que yo exista a mi pesar. Por eso borrás letra por letra cada referencia a tu miedo, cada rastro de tu carne, cada testigo de tus huellas.

De pronto escuchás que alguien pide la cabina 9 y se sienta en tu silla y escribe con vos tu nombre.

Las redes no fueron hechas para salir.